El pasado mes de febrero fue el más caluroso de los registrados hasta el momento. ¿Casualidad? Todavía habrá algún escéptico que crea que el cambio climático no es real. Cada vez el invierno es más corto y más suave.

Por ello, cada vez es más importante tener los sistemas de refrigeración y ventilación optimizados.

Y es mucho más fácil y económico de lo que crees.

Muchos de estos ahorros se pueden conseguir simplemente mejorando el control operacional de las instalaciones sin tener que hacer grandes inversiones ni cambio de equipos. Muchas veces los ahorros pueden ser mayores al cambiar algún punto de consigna en un display que realizando un cambio de un equipo por otro más eficiente.

Para mantener las mismas condiciones de confort (o trabajo) se pueden consumir cantidades de energía muy dispares en función de si los sistemas están optimizados o no.

Por ejemplo, para mantener una temperatura interior de 22ºC, la temperatura del sistema de refrigeración puede estar a 6ºC o a 10ºC, alcanzando en todo momento los mismos requerimientos finales. En demasiadas ocasiones nos encontramos con puntos de consigna de temperatura o presión muy por encima de las necesidades reales de los procesos.

El mejor ejemplo es el sector farmacéutico. GEN Europe tiene mucha experiencia en este sector, en el que la demande de refrigeración es muy alta debido a las limitaciones que pueden tener las salas blancas y entornos GMP para mantener ciertas condiciones de temperatura, humedad, partículas, etc.
Si es posible ahorrar en ambientes como éstos, imagínate en otras situaciones menos restrictivas. El potencial de ahorro vinculado a la mejora del control operacional es inmenso.

Además de los beneficios energéticos, en muchas ocasiones, esta reducción de consumos ayuda incluso a optimizar los diferentes procesos productivos, a reducir el mantenimiento de los equipos ampliando su vida útil y a mejorar las condiciones de confort.
Es muy difícil cuantificar los beneficios no energéticos de algunas de las oportunidades de ahorro, pero existen estudios que indican que pueden tener un valor económico superior al doble del ahorro energético.

Te mostramos a continuación 12 medidas de ahorro que puedes aplicar en tus instalaciones para comenzar a ahorrar desde ya.

12 medidas de ahorro energético en primavera

Usar puntos de consigna variables en el circuito de refrigeración

¿No crees que no tiene sentido generar agua fría a 6ºC durante todo el año, cuando la temperatura exterior (y por tanto la demanda real) varía tanto a lo largo del año?.

Proponemos variar dicho punto de consigna en función de las temperaturas exteriores a través del uso de curvas de compensación.

Revisar el salto de temperatura del circuito de evaporación.

Normalmente, las enfriadoras están diseñadas para un salto térmico de unos 6ºC. Así que si esta diferencia entre entrada y salida del equipo es menor, puede ser un indicador de que el equipo todavía tiene capacidad adicional para refrigerar.

Optimizar la secuencia de arranques y paradas de equipos.

Se debe tratar de tener siempre el mínimo número de enfriadoras y bombeos en marcha. Los sistemas de bombeo, además de estar consumiendo de manera innecesaria, están aportando calor al fluido que transportan. Por lo tanto, sobre todo en sistemas de refrigeración es prioritario tener el menor número de equipos posible encendidos.

Priorizar que los equipos trabajen en un % de carga eficiente.

Cuando existen diversos equipos, es importante diseñar la secuencia de entrada en carga de cada uno de ellos en función de su % de carga óptima. De esa manera, estaremos usando en cada momento el equipo que mejor se adapta a las necesidades concretas. En este mismo sentido, en futuros diseños, tanto en equipos de producción de frío, como en bombeos, es importante no sobredimensionar para asegurarnos de que los equipos trabajan en puntos de carga eficientes.

Promover el free-cooling hidráulico.

Se trata de generar el agua refrigerada a través de las torres de refrigeración cuando las temperaturas exteriores son bajas pero aun así existe demanda de frío en algunas salas (bastante común en industria).

Utilizar el free-cooling en las UTAS.

Consiste en introducir, en la medida de lo posible, la mayor parte de aire posible para climatizar cuando las condiciones exteriores son similares a las de confort, con el consiguiente ahorro en refrigeración o calefacción adicional.

Disminuir el caudal y la presión en los bombeos.

¿Cuál es el caudal y la presión crítica en nuestra instalación?

¿Por qué estar por encima? Debido a las leyes de afinidad, con pequeñas reducciones de caudal se consiguen grandes ahorros eléctricos en los motores.

Evitar válvulas de tres vías.

Es importante instalar siempre variadores de frecuencia y válvulas de 2 vías para bombear solamente el mínimo caudal necesario en cada momento. De esta manera evitaremos tener siempre el mismo caudal circulando por las instalaciones sin estar siendo utilizado. Si ya existieran las válvulas de 3 vías, se podría cortar la vía del by-pass mediante alguna válvula de corte o instalando algún “tapón” en esa vía.

Usar motores de alta eficiencia.

Realizar un estudio para analizar el periodo de retorno cambiando un motor por otro igual de una mayor eficiencia (especialmente en aquellos sistemas que funcionan 24 horas, 365 días al año). Por lo general, los periodos de retorno resultantes son muy atractivos, cercanos a los dos años.

Evitar renovaciones de aire sobredimensionadas.

Este es quizás el mayor potencial de ahorro que tienen todos los entornos GMP. Es muy común ver un número de partículas muy por debajo de los requerimientos de la ISO 14644 También hemos comprobado al analizar las cualificaciones de muchos laboratorios que la calidad del aire de las salas está hasta 1000 veces por encima de los requerimientos de la UNE-EN ISO 14644, debido a un exceso de renovaciones de aire. Desde GEN Europe ayudamos a realizar las estimaciones que podría suponer, por ejemplo, reducir las renovaciones de aire de una sala de 20 a 15, asegurando en todo momento que se seguirán cumpliendo los requerimientos existentes.

Revisar calibración instrumentos

Especialmente de los más críticos que pueden influir en los consumos energéticos. Existen algunas sondas, como la que controla la temperatura del agua de las enfriadoras, que pueden causar un exceso de consumos muy significativo (un 3% por cada grado de diferencia). Y de igual manera en las UTAs y sistemas de bombeo, hay ciertos elementos cuya calibración debería ser revisada frecuentemente.

Usar ventiladores alta eficiencia y variador de frecuencia.

Especialmente en zonas de uso 24 horas y 365 días. Actualmente existen ventiladores cuya eficiencia y posibilidad de regulación es muy superior a los equipos instalados hace varios años. Por ejemplo, los ventiladores con motores EC nos permitirían reducir los consumos y regular su caudal en todo momento.

Desde GEN Europe, proponemos siempre empezar revisando los diferentes puntos de uso. Una vez que estos consumidores estén siendo eficientes, se deben ajustar las diferentes distribuciones de bombeos, ventilación etc., para por último ajustar los sistemas de generación de refrigeración, calefacción, vapor, aire comprimido, etc

¿Como seguir mejorando?

Somos conscientes de que los operarios de las instalaciones son grandes profesionales que conocen mejor que nadie el funcionamiento de sus equipos.
Pero siempre se pueden identificar oportunidades de ahorro en control operacional, revisando con estos operarios parámetros críticos de operación que puedan ser optimizados en base a las mejores prácticas.

Llevamos muchos años ayudando a nuestros clientes a reducir sus consumos mediante:

No podemos seguir pensando que el ahorro energético es, simplemente algo “deseable” y socialmente “bien visto”.

Ya es tarde para eso.

Reducir los consumos energéticos y aumentar la eficiencia energética es algo necesario, prioritario, y urgente.

Y todos y cada uno de nosotros podemos hacer algo para mejorar, desde hoy mismo.